Cualquier cachorro resulta entrañablemente adorable, pero los cachorros de Basset Hound se caracterizan por ciertas particularidades que les hacen especialmente atractivos. Sin embargo a pesar de este atractivo es importante tener en cuenta que antes de decidirnos a incorporar un cachorro tanto de Basset Hound como de cualquier otra raza, valoremos adecuada y razonadamente si estamos dispuestos a asumir el coste que supone mantener a un nuevo miembro de la familia y también si estamos dispuestos a adaptar nuestro estilo de vida para poder hacerlo compatible con la llegada de este nuevo miembro de la familia que si todo va bien nos acompañará durante muchos años.
En ese sentido, recomendamos la lectura del siguiente artículo redactado por el famoso escritor Arturo Pérez Reverte y titulado No compres ese perro.
Hecha esta reflexión ahora si que describiremos que características hacen tan especial a un cachorro de Basset Hound.
Testarudez y cabezonería entrañable
Si hay algo que caracteriza especialmente a un cachorro de Basset Hound (bueno, y también a un Basset Hound adulto) es su testarudez y cabezonería, fruto de la selección realizada en esta raza desde hace ya casi siglo y medio, puesto que al tratarse de una raza de rastro, desde el comienzo se seleccionaron aquellos ejemplares que mostraban una mayor querencia a perseguir un rastro por encima del resto de consideraciones e incluso de la llamada de las personas.
Los cachorros de Basset Hound no están exentos de esta característica y ya desde muy pequeños muestran su tozudez y están dispuestos a retarnos en todo momento a ver quien gana los pulsos que tan frecuentemente echan estos pequeños paticortos de orejas largas y miradas melancólicas. Es precisamente esta mirada la que permite ganar buena parte de las batallas que nos planteará en cuanto a tozudez. De esta forma desde muy pequeños, los cachorros de Basset Hound mostrarán su cabezonería negándose a andar en determinados momentos, o negándose a comer incluso durante varios días, etc.
Por tanto debemos ser conscientes de que la tozudez es una característica íntimamente ligada al Basset Hound y aceptarla, si bien es importante ser más fuerte que ellos y no ceder.
Pequeños comediantes
El peculiar aspecto que tiene el Basset Hound resulta extremo cuando son cachorros, puesto que la desproporción de sus orejas en relación a su tamaño hace que continuamente se las pisen y tropiecen mientras caminan. Además, su peculiar morfología hace que cuando son cachorros tengan un andar muy cómico.
Esta circunstancia hace que desde muy pequeños los cachorros de Basset Hound disfruten haciéndonos reír, en incluso es habitual que asuman con naturalidad el papel de comediante en la familia, haciéndonos pasar momentos memorables gracias a sus especiales dotes en este aspecto.
Grandes traviesos
Otra característica muy habitual en el Basset Hound, tanto cuando son cachorros como cuando son adultos es que son especialmente traviesos y más de una vez nos meterán en un lío con sus travesuras o nos harán llevarnos las manos a la cabeza. Ante este tipo de travesuras debemos mostrarnos firmes y aunque en ocasiones nos resulten graciosas debemos educarlo con firmeza para evitar malos comportamientos y si es necesario regañarle por alguna travesura deberemos hacerlo, resistiéndonos a la cara que ponen cuando saben que han hecho algo mal.
Tremendos glotones
Los cachorros de Basset Hound normalmente son grandes comedores, y además de su pienso no dudarán en comerse todo lo que tenga aspecto comestible para ellos (aunque sean alimentos desagradables para las personas, como animales muertos, restos de comida podrida o deposiciones de perros, personas u otros animales). Por ese motivo debemos estar especialmente atentos a evitar que accedan al cubo de la basura en nuestra casa, o mientras vamos de paseo vigilarle especialmente si lo llevamos suelto, puesto que no dudará en engullir todo aquello que encuentre por el camino, lo que incluye hasta piedras, ramas o cualquier cosa por muy inverosímil que nos parezca.
Estas medidas de precaución nos evitará acudir al veterinario más de una vez.
También debemos acostumbrar a nuestro cachorro de Basset Hound a no darle comida mientras estamos comiendo o no darle sobras de comida, puesto que la comida para los humanos no siempre es buena para un perro, debido a los condimentos y a los métodos de preparación de comida que utilizamos para nuestra comida.
Más bien comodones
Los Basset Hound tienen cierta tendencia a gustarles subirse al sofá y a la cama incluso desde muy pequeños, por lo que si no somos firmes en su educación, desde muy jóvenes querrán dormir en estos lugares, situación que debemos evitar porque para eso está su sitio y además la subida a sofás y camas resulta perjudicial para su espalda, especialmente cuando ya son perros adultos y la columna vertebral ya no es tan flexible como cuando eran jóvenes. Por tanto, desde cachorros debemos evitar permitirles que se suban a la cama o al sofá, puesto que en caso contrario una vez que tengan aprendido el hábito será muy difícil convencerles para que se bajen debido a su testarudez.
Un poco guarretes
Aunque acaban aprendiendo a hacer sus necesidades en la calle, habitualmente el proceso de aprendizaje es más bien lento en comparación con otras razas. Ello no significa que el Basset Hound sea una raza poco inteligente, pero si es cierto que debido a que muchas veces los tenemos excesivamente consentidos o bien a causa de su testarudez, resulta complicado que dejen de hacer sus necesidades en casa e incluso cuando ya tienen un año o más, todavía será frecuente que hagan alguna vez pis en casa por la noche o en algún momento que nos descuidemos.
Para ello es importante ser muy constante en su educación y ser más testarudos que ellos, no tirando nunca la toalla, porque en caso contrario el proceso de aprendizaje será aún más largo.
Especialmente sociables
Dado que tienen un aspecto muy llamativo, desde muy pequeños los cachorros de Basset Hound se acostumbran a ser tocado y acariciado por todo el mundo que se cruza por su camino. Esta circunstancia unido al carácter sociable y gregario inherente a la raza hace que un Basset Hound se vaya prácticamente con cualquier persona con la que se encuentre por el camino, por lo que debemos tener especial cuidado para que no se nos extravíe en caso de que lo llevemos suelto, puesto que en caso contrario en un momento que lo perdamos de vista se puede ir con otra persona o con otro perro.